Hidrógeno verde : un vector energético de rápido crecimiento
El hidrógeno verde es una de las soluciones más prometedoras para descarbonizar el consumo de energía. El hidrógeno verde ya forma parte de las estrategias para avanzar hacia la neutralidad del carbono en los sectores en los que es una alternativa esencial para reducir las emisiones, como las industrias de transformación de gran consumo de calor, el transporte pesado o la producción de fertilizantes.
Hay tres tipos de hidrógeno :
HIDRÓGENO GRIS
Se produce a partir de combustibles fósiles (principalmente gas natural y carbón) y, por tanto, es muy intensivo en carbono. Este hidrógeno representa casi la totalidad de los 70 millones de toneladas de hidrógeno que se producen en la actualidad y será sustituido en los próximos años por el hidrógeno azul y verde en cuanto se den las condiciones técnicas y económicas.
HIDRÓGENO AZUL
También producido a partir de combustibles fósiles, pero combinado con un proceso de captura y almacenamiento de carbono. En particular, esta solución de producción permite utilizar las instalaciones de hidrógeno gris existentes neutralizando sus emisiones de CO2. El dominio tecnológico a gran escala del hidrógeno azul y su competitividad económica siguen siendo objeto de trabajo por parte de los agentes de la cadena de valor.
HIDRÓGENO VERDE
Fabricado a partir de agua y electricidad renovable mediante un proceso de electrólisis que no emite CO2 (Power To H2). Esta solución es la más creíble y prometedora gracias al rápido descenso de los costes de producción, impulsado por la mejora de la eficiencia de los sistemas de producción, la llegada de nuevas tecnologías de electrólisis, la masificación de los volúmenes y la caída del precio de la electricidad renovable.
El hidrógeno descarbonizado tiene muchas aplicaciones
En el transporte y la movilidad
Este combustible sostenible permite la descarbonización del sector
En las materias primas de algunas industrias que actualmente utilizan hidrógeno gris
Permite la descarbonización de los procesos de producción química y de las industrias de transformación
En la producción de calor (por combustión directa, por ejemplo, producción de metano por metanización)
Para sustituir al gas natural en la producción de calor
En la producción de electricidad a partir de energías renovables intermitentes
las centrales eléctricas que utilizan hidrógeno verde como combustible o que generan electricidad a partir de pilas de combustible pueden almacenar la electricidad producida a partir del hidrógeno verde
El despliegue del hidrógeno verde para estos diferentes usos dependerá de la disminución de su coste de producción y de la velocidad de adaptación de los equipos a este nuevo vector energético.
Así, en los próximos años, el coste total de propiedad (TCO) de los vehículos ecológicos de hidrógeno disminuirá rápidamente, mientras que las soluciones de adaptación de los vehículos seguirán desarrollándose y los fabricantes desarrollarán nuevos modelos.
Para alcanzar sus objetivos de descarbonización en 2050, Europa y el gobierno francés han movilizado programas de subvenciones muy importantes para conseguir, inicialmente, 40 GW de electrólisis en 2030.
Estas subvenciones también permitirán poner en marcha usos complementarios a la movilidad verde, que requieren un precio más bajo para el hidrógeno verde, pero que representarán la mayor parte de los volúmenes en 2050.